Por Carlos Almenara
La última semana de junio asistimos a dos anuncios impactantes para la política económica de la provincia de Mendoza que tuvieron poca repercusión y casi nulo debate. Desde el gobierno anunciaron el fin de la lucha antigranizo, el cierre del Instituto de Desarrollo Rurar (IDR) y mismo camino para otros institutos análogos. Estos son algunos de los pocos instrumentos, pero muy decisivos, que tiene la provincia para estimular la producción.
El gobernador Cornejo manifiesta
cada vez que tiene un micrófono delante, incluyendo la última apertura de
sesiones legislativas, que la suerte de la economía mendocina depende de la
macroeconomía y de las decisiones nacionales. Esto es una verdad a medias, o,
como lo plantea Cornejo, una excusa mentirosa. La lucha antigranizo y la política
agropecuaria que puede impulsarse desde el IDR, son ejemplos de que la
provincia sí tiene cosas para hacer, es una decisión política no hacerlas o
hacerlas mal. Por otro lado, es muy sencillo darse cuenta el subtexto que
debería leerse detrás de las afirmaciones del gobernador: “que las cosas anden
mal no es culpa mía”, por supuesto un verdadero engaño. Sí es culpa de Cornejo,
por su política económica provincial y
¡por su política económica nacional!
¿Si Cornejo no ha sido presidente ni ministro de economía, objetará algún lector, por qué tendría responsabilidad por las decisiones nacionales? Porque a nivel nacional apoyó e impulsó políticas nocivas para la provincia. Solamente considerando el tamaño de la economía, apoyó a Macri cuya política destruyó la economía argentina con una caída de más de 4,2% del producto, combatió la política de Alberto Fernández que hizo crecer el PBI más de 4% a pesar de pandemia, guerra y sequía, y apoya a Milei que en sólo 4 meses desplomó el PBI más de 5%.
Primera conclusión, entonces, las políticas que apoya y milita Cornejo perjudican al país. ¿Se puede hablar de mala praxis de Cornejo en su proyección nacional? Los datos duros dicen que sí.
Hay más, si gobierna Cornejo a Mendoza le va peor que al país. Durante el primer mandato del actual gobernador el Producto Bruto Geográfico (PBG, equivalente al PBI pero provincial) cayó más de 6%, es decir, Cornejo es casi un 50% más dañino que Macri, lo que no es decir poca cosa. De la comparación con Milei aún no tenemos datos.
Segunda conclusión: Cornejo apoya malas políticas nacionales pero es aún peor gobernando la provincia. Si miramos Mendoza se repite el diagnóstico de mala praxis evaluada por resultados. Al país le fue mal con Macri (apoyado por Cornejo) pero a la provincia le fue aún peor (gobernada por Cornejo).
Podríamos alegar que los resultados son azarosos, que hay factores insondables que los afectan. Los futboleros entienden, ¿evaluamos al técnico por los resultados o por cómo juega el equipo? Ya vimos que los resultados fueron desastrosos, ¿cómo juega el equipo?
Con Aguilar Villanueva podemos hablar de la “hechura de las políticas públicas”.
¿Qué es “jugar bonito” en materia de políticas públicas?
Más allá de los debates teóricos y paradigmáticos al respecto, las políticas públicas requieren planificación, implementación y evaluación. Cualquier analista debería estar de acuerdo que un buen plan, una adecuada implementación y una correcta evaluación constituyen el núcleo de una buena práctica gubernamental.
La planificación y la implementación de la lucha antigranizo y del IDR atravesaron distintas gestiones de gobierno, corresponde a Cornejo realizar la evaluación de dichas políticas, máxime si decide discontinuarlas. Hay datos disponibles, corresponde mostrarlos, analizar, dar razón de las decisiones. No se ha hecho.
El gobernador es licenciado en Ciencia Política y Administración Pública, estamos ante un caso de mala praxis en el propio terreno de formación específica de Alfredo Cornejo, son decisiones técnicamente mal tomadas. Esta dimensión es independiente de la corrección o no de discontinuar la lucha antigranizo y el IDR. Esté bien o mal decidir lo que decidió el gobierno es una medida no fundamentada, en consecuencia técnicamente incorrecta.
Matías Becerra aporta cuatro imágenes de prensa que ilustran el cambio de opinión del gobernador en sendos temas: lucha antigranizo e IDR.
Cuando Cornejo loaba la lucha antigranizo
Cuando se convirtió un mito
Cuando somos un ejemplo de políticas rurales
Cuando es tirar la plata
El bloqueo mediático que padece la provincia, el blindaje que tiene el gobierno provincial por parte de los medios de mayor audiencia, ha impedido la discusión de estos temas. Algunas excepciones pueden verse en estas dos notas:
Mauricio Marín de la Cámara de Comercio de San Rafael sobre la finalización de la lucha antigranizo
Mario Leiva de la Sociedad Rural del Valle de Uco sobre la eliminación del IDR
A nuestro criterio las razones que explican el deterioro provincial al que asistimos la última década están relacionadas principalmente con los rumbos elegidos por una élite gobernante (una verdadera casta), aunque también es visible que se ven agravados por la mala praxis.