miércoles, 11 de diciembre de 2013

Reclamos policiales, saqueos y relato

Es insostenible para cualquier sociedad que pretenda un funcionamiento democrático aceptar que la fuerza de seguridad interior, a la que el pueblo a través de sus representantes otorgó armas e invistió de autoridad civil, se levante en desafío y extorsión al poder político.
¿Por qué hemos llegado a esta situación?
Seguramente hay múltiples causas concurrentes.
Es importante partir de un hecho que estos acontecimientos corroboran: en Argentina la policía tiene control de la calle.
No es un tema nimio toda vez que aún la arqueología más desinformada de estos levantamientos policiales debe partir de la crisis de la policía cordobesa fruto de la extendida complicidad con los narco de esa provincia.
Una pregunta estructural entonces es si la complicidad demostrada en Córdoba es una curiosidad o replica en otras geografías. Vale mencionar la detención de Hugo Tognoli, jefe de la policía de Santa Fe por delitos vinculados al narcotráfico.
Seguramente en Córdoba hay muchos policías honestos, pero claramente otros no.
La estructura militarizada de las policías del país en que prima el mando y la subordinación absoluta al superior, cuando hay mafias genera un problema para la democracia que no es desconocido para nadie y sobre el que no pueden hacerse los distraídos los responsables.
El autocontrol policial agravó los problemas.
La sindicalización de las policías en estos contextos es una propuesta absurda cuando no una avivada mafiosa.
El primer requisito de una discusión, fuera de acciones sediciosas, sería establecer mecanismos por los que los niveles inferiores puedan denunciar a sus jefes y sean protegidos, lejos de lo que han planteado los defensores de la organización opaca.
El relato de quienes develaron el entramado de complicidad en Córdoba llega rápidamente a la conclusión que lo que reclamaban por un lado es lo que dejaron de percibir en la caja negra que “saltó”.
Estos hechos son muy importantes, son conocidos, urge trabajar sobre ellos desde el Estado y desde la sociedad civil que no puede permitir que policías corruptos sean los administradores del delito en las ciudades.
Otras causas concurrentes tienen que ver con necesidades insatisfechas que efectivamente existen en sectores sociales postergados, el efecto imitación, los sindicatos de derecha que aprovechan para disfrazarse de combativos, en fin un complejo juego de variables que dan la magnitud de una sociedad difícil, vivaz, llena de problemas pero también de posibilidades de crecimiento.
Sobre todas estas causas, y este es el núcleo de mi opinión, sobre todas estas causas que conforman el entramado de la realidad, se yergue una, una causa que no es causa, es una metacausa, porque no forma parte de la realidad sino de cómo se describe la realidad.
El relato que hace posible que lo disvalioso, lo impensado o lo impensable, sea puesto en el lugar de lo “legítimo”, de lo “natural”. Lo que el monopolio de la manipulación semiótica liderado por el grupo Clarín ha construido desde 2008 y que pone en el lugar de campeón de la pacificación a un vicepresidente que traiciona a su gobierno en un plan de golpe como los que luego triunfaron en Honduras y Paraguay, el que da estatus de “sufrido chacarero” a un productor sojero que corta las rutas y desabastece a la población a los tiros, el que presenta como un adalid de la libertad de expresión a uno de sus periodistas estrellas que desea en cámara la muerte de la presidenta, el que naturaliza el símbolo del “fuck you” además de otros insultos reiterados en sus millonarias pantallas, el que incita a los saqueos y tantas otras cosas.
Si ese monopolio que construye creencias (afortunadamente no las construye todas) plantea que es “natural” reclamar de ese modo, si además es acompañado por sectores de la oposición que no han podido evitar lo que en otro lado he llamado una “matriz de construcción de oposición política”(1), evidentemente esta construcción del relato, esta interpretación de qué es posible y “natural” y de qué un acto ominoso repudiado socialmente, tiene un impacto sobre qué hacen los policías en cada provincia.
Resolver el sistemático ataque de Clarín a la democracia es necesario también para tener mejor seguridad y mejor policía.

(1) http://politicadigital.com.ar/provinciales/noticias-de/mendoza/5395-una-matriz-de-construccion-de-la-oposicion-politica

martes, 15 de octubre de 2013

Los delitos no se heredan, las empresas sí, la lucha también


La gaffe de la sra. Carrió: “vos que sos hijo de desaparecidos tenés que saber que los delitos no se heredan” espetada a Juan Cabandié constituye una escena ideal para ver parte medular de la política actual. (Mirá el video en
http://www.youtube.com/watch?v=pO6WEGWoQKQ).
Los intentos de explicación posteriores fueron totalmente inverosímiles. Alegó que se refirió a sus apropiadores, cosa que palmariamente desmiente la filmación. Es claro que esa es la opinión de Carrió y de una parte de la sociedad, lo ominoso es que escondan su pensamiento. Como aquello que se reprime, aparece en los lapsus.
El primer punto que muestra esta escena, entonces, es la fragilidad de los avances conseguidos en materia de Derechos Humanos y de memoria, verdad y justicia.
Néstor y Cristina Kirchner establecieron como eje estratégico las políticas de memoria, verdad y justicia en la concreción de un paradigma de derechos que pone a la Argentina a la vanguardia mundial. Pero esto, contrariamente al pregón falaz de sectores opositores, se hizo contra la mayor parte del sistema político y de poder del país. Carrió y compañía, como no se animan a plantear el debate franco, aducen falsedades: que el gobierno “imposta”, que cooptó organismos de DDHH, que es una política demagógica..., todo por no decir la verdad: no están de acuerdo con los juicios pero no se animan a decirlo.
Por si hace falta señalarlo, la canallada de Carrió, revictimiza a los agredidos por el terrorismo de estado, actualiza el discurso de la dictadura.
Carrió, como Lanata, han asumido un rol protagónico en la propaganda contra la investigación sobre la filiación de los hijos adoptivos de Ernestina Herrera, titular del grupo Clarín.
A cada segundo es necesario aclarar aquello sobre lo que Clarín miente. No está probado que no sean hijos de desaparecidos, lo único que está probado es que las adopciones fueron irregulares.
Lo más interesante es preguntarse ¿por qué Ernestina Herrera adoptó estos dos chicos? ¿Vocación maternal? No, no. Adopción para burlar a la otra posible heredera, Lupita. Solo eso justifica el brío con que usaron y usan el apellido del creador de emporio, Roberto Noble, para estos muchachos que nacieron aproximadamente cinco años después que Noble hubiera muerto.
De lo que hablamos es de un fraude del que probablemente Carrió sí sepa.

“Cuando le consigue los chicos a Ernestina, Magnetto se queda con la línea editorial del diario –relató Pirillo a los autores-. Ahí, en 1976, él toma el poder. Y ahí también es cuando él empieza a tener poder en Papel Prensa. A Ernestina la tiene en una caja de cristal, la hace vivir como una reina madre, pero no manda. Esa fue la maniobra que hizo Magnetto.
Él nunca apareció como siendo él el que entregó los chicos a Herrera de Noble. A mí me pidió que no publicara nada en La Razón sobre el tema de los hijos de desaparecidos. Me dijo: ‘Tengo el suficiente poder, José, dejate de joder, los hijos se los conseguí yo con Videla’. Textuales palabras. Cuando dejo de publicar sobre hijos de desaparecidos y sigo con apropiación de bebés y tráfico de bebés me vuelve a pedir: ‘Che, no publiqués nada’. Yo le pregunté: ‘¿Pero qué pasa con eso?’. ‘Que me afecta a mí y a mi mujer, José, porque los hijos que tengo me los consiguió Elisa Carrió en el Chaco cuando era empleada de la Corte Suprema’. O sea que no están sólo los hijos de Herrera de Noble en el paquete, están los de él de por medio.” Pirillo dixit.
El párrafo es una cita textual de Cecchini, Daniel y Mancinelli, Jorge; Silencio por sangre. La verdadera historia de Papel Prensa. -1ra ed.-, Bs As, Perio Mundo, 2010, pp. 94-95.

No está claro si Argentina tendrá la fuerza democrática para que la justicia avance en establecer la verdad sobre estos puntos, por eso hoy más que nunca es necesario machacar en la conciencia popular, en las causas de los militantes nobles para que los sueños de verdad y justicia no terminen silenciados por las corporaciones. Es decir digan lo que digan los jueces, nos encargaremos que la lucha sí se herede.




domingo, 11 de agosto de 2013

Corporaciones contra la libertad


Por: Carlos Almenara
c.almenara@hotmail.com

¿Qué tienen en común los siguientes hechos?

1. El señor H. Magnetto inicia juicio contra Víctor Hugo Morales
2. Diario Los Andes, del grupo Clarín, ataca en sus páginas a Radio Nacional.
3. Periodistas de Radio Nacional reciben amenazas e intimidaciones.

Desde 2008 los medios hegemónicos agreden sistemáticamente a la democracia. El mayor de los grupos, Clarín, lleva la voz cantante.
En un plan sistemático destinado a horadar al gobierno este grupo inventa noticias, las manipula y las presenta de manera de ir construyendo odio e indignación en el receptor. Odio, se entiende, hacia la presidenta, sus funcionarios y simpatizantes.
El descaro es tan grande que sus periodistas se enojaron frente a cámara porque cuando fue operada se descubrió que la presidenta no tenía cáncer.
Entre otras cosas esto es una maniobra de legitimación de la violencia (hasta ahora simbólica). ¿Cómo cuestionar a un comentarista de un diario electrónico que insulta o incita al delito si Nelson Castro lo hace abiertamente en cadena nacional del desánimo?
El comentarista del diario electrónico siente que está en todo su derecho de agredir y proponer violencias variadas. No sólo siente que está en su derecho, siente que se conecta con el “universo Nelson Castro” cuando lo hace.
Ahora la cosa está en un punto interesante. El principal ariete de Clarín, Lanata, es un showman. Está muy bien, es lo que denunciamos hace tiempo: que esos medios no dan noticias, hacen un show de noticias. Inventan, manipulan, descontextualizan, todo según el guión de su show. Tenemos que saber que cada uno de sus noticieros, sus radios, sus diarios sólo pueden ser comprendidos en la misma clave.
Lo que hace tiempo pedimos al conjunto de la militancia política, independientemente de su valoración sobre el kirchnerismo, es que nos juntemos para evitar que este grupo siga secuestrando la política del país.
Hagamos un repaso.
Se quedaron con Papel Prensa, la única fábrica de papel para diarios de la Argentina en un acuerdo con la dictadura. Ellos ocultaban los crímenes, la dictadura les daba la fábrica.
Con la fábrica apretaron a todos los diarios del interior. Les negaban el papel, se lo vendían más caro o le asignaban una cuota insuficiente. Así se quedaron, entre muchos otros, con Diario Los Andes.
Apretaron a los políticos para que modificaran la ley de radiodifusión de la dictadura y le permitieran incursionar en los medios audiovisuales.
Se quedaron con Canal 13 en su acuerdo con Menem, acuerdo que incluyó violar los derechos de los trabajadores y estafar al Estado.
Se quedaron con más del 60% de la TV por cable de Argentina. ¿Cómo lo hicieron? Compraron el fútbol. Entonces competían deslealmente con todos los cables del país (que fueron muchísimos). Al vecino le decían –te cobramos lo mismo o menos que el cable local y además te pasamos fútbol (el cable local no)-. ¿Quién piensa Ud. que se quedaba con el cliente? Ahora políticos opositores hacen fila para prometerle al grupo perverso que le van a devolver el fútbol (el que perdieron con “Futbol para todos”).
Entre paréntesis, ¿se acuerda cuando mostraban las tribunas durante el partido y había que esperar al domingo a la noche para ver los goles? ¿No fue humillante esa situación?
Este grupo tiene una influencia manifiesta en la justicia. Ha conseguido jueces en las distintas instancias que le permitieron eludir la aplicación de la Ley de Medios. Es una gran injusticia para el conjunto de la población.
La respuesta a ello por supuesto que se dará el día que consigamos que la Justicia sea justa. Pero también se da construyendo la comunicación alternativa. Construyendo más medios chicos, audiovisuales, gráficos, virtuales, medios comunitarios, medios del sector sin fines de lucro. Y también medios grandes pero con discursos democráticos y alternativos al de la cadena nacional del desánimo.
Allí, en esa tarea, tenemos todos una convocatoria, que no sólo nos dignificará en lo individual y colectivo próximo sino también en lo que le aportamos a una Nación más libre y más justa.


sábado, 15 de junio de 2013

Las posibilidades de Nuevo Encuentro

El Frente Nuevo Encuentro reúne un conjunto de partidos y organizaciones políticas y sociales entre las que en el orden nacional se encuentran Solidaridad e Igualdad, Partido Solidario, Movimiento Octubres, Encuentro por la Democracia y la Equidad, Partido Comunista, Encuentro Socialista.

¿Cómo definir una fuerza política?

Estamos demasiado acostumbrados a que los partidos se construyen de un modo más o menos flexible en torno a su máximo referente. Es un signo de época. Incluso dentro de los llamados “partidos grandes”, las líneas internas se estructuran generalmente de este modo.

Si una fuerza política es sólo un conjunto humano que gira en torno a su máximo líder, entonces su devenir y coherencia estarán atados a atributos de ese/esa líder.

¿Es posible pensar otro modo de construcción política en épocas, como ésta, de personalización de la comunicación?

Sí y por varios motivos. Daré tres.

Primero porque la historia de los partidos políticos del S XX muestra su institucionalización orgánica. Hay autores, como B. Manin que señalan hacia los finales del S XX una regresión a la estructura partidaria decimonónica en el sentido de que las élites en torno al “candidato” semejan bastante a los “vecinos connotados” o a los “aristócratas ilustres” que dominaban la escena del S XIX. La caracterización, por supuesto, tiene vinculación con la evolución de los medios de comunicación masiva pero no tiene nada de indefectible.

Es posible y necesario recrear lo que buena parte de la militancia llama “el proyecto colectivo”, único modo de lograr hacer trascender un proyecto más allá del coto personal.

De hecho, parece haberse producido un fenómeno de este orden en varios países suramericanos. Gobiernos llamados “populistas” rompieron buena parte de lo estatuido y recrearon nuevas institucionalidades. Por supuesto que nada nace de la nada. Los procesos se constituyeron con herencias previas y a partir de allí introdujeron la novedad. Por caso, la novedad “bolivariana” de Venezuela. Una “novedad” radical que recupera al prócer muerto hace casi doscientos años para recrear un proyecto emancipador. Cómo construir organización en torno de estos nuevos clivajes, de estas nuevas escisiones, trascendiendo a los líderes carismáticos es en mi opinión la pregunta política central de hoy.

De todos modos puede pensarse que hay indicios de una especie de vuelta a la situación que enfrentaron los partidos “modernos” del siglo XX, que en la tipología europea se caracterizaron por una izquierda o centro izquierda y una derecha o centro derecha y que en nuestros países estaría marcada en referencia a estos procesos: UNASUR vs alineamiento a Estados Unidos, estado fuerte vs estado gendarme, intervención estatal vs. liberalismo extremo, organización social vs individualismo, participación democrática vs gobierno de corporaciones.

Segundo porque la ideología existe, aglutina y ordena. Sobre la ideología existen dos grandes miradas, la ideología como alienación y la ideología como soporte de sentido e interpretación. Sin detenerme en este denso tema me apoyo en el segundo concepto.

Las miradas revolucionarias y reformistas, las historias de las izquierdas, las tradiciones nacionales y populares, son, al mismo tiempo, las que atesoraron sueños y herramientas durante el neoliberalismo, las que posibilitaron un horizonte de reflexión hacia el futuro y las que dieron sentido interpretativo al proyecto del nuevo tiempo.

Hay, además, una tendencia a que quienes tienen una cierta “ideología” común se junten, pero que se junten en sólo lado. Claro, hoy esto no pasa demasiado, tampoco pasa demasiado que esté clara la ideología de una fuerza política. Es de esperar que la fuerza centrípeta de la ideología sea contraria a la fuerza centrífuga del narcisismo.

Tercero porque existe conciencia crítica en una enorme cantidad de gente que sólo la organización puede dar carnadura a una verdadera recuperación de “lo político”. Es imposible enfrentar a los grupos económicos y mediáticos concentrados sin una organización acorde al desafío.

La política del “consenso”, de la “no política”, es un juego de máscaras que disputan el escenario para decir lo mismo con distintas gracias. “Hay poderes y reglas establecidos y no se tocan” es la máxima sacrosanta de la política sin política. Hay explicaciones que varían, la globalización en los noventa, un falso “republicanismo” gana las menciones actuales.

Los acaeceres relativamente reciente me han convencido que la palabra, la voluntad, la conciencia pueden empujar la historia y, entonces, que mucha gente sepa de la necesidad de la organización ayudará a su concreción.

Todo lo anterior tiene un sentido: una fuerza política NO es un/a líder.

Una definición entonces

Las identidades siempre son construcciones en proceso y pocas cosas necesarias e inmodificables hay en ellas.

Una identidad política como Nuevo Encuentro puede ser una fuerza política que canalice un conjunto de tradiciones vinculadas con las izquierdas y con lo nacional – popular a la causa que en Argentina se ha llamado “kirchnerismo”. Un conjunto a reunirse con otros conjuntos.

Puede ser eso o puede ser cualquier otra cosa. Si vemos la foto de buena parte de la política estructurada del país, puede ser también el capricho de sus dirigentes.

Pero como señalé más arriba así como hay tendencias fuertes a la personalización y, en ese caso, el análisis se circunscribe (con beneplácito de los periodistas de los medios hegemónicos) a un subjetivismo psicologista o en el mejor de los casos a una especie de ajedrez entre élites en disputa; del mismo modo hay fuerzas que compelen a la sensatez y a la unidad en la defensa del proyecto enunciado, fuerzas que claman por la coherencia entre lo que se dice y se hace, que impulsan al fortalecimiento del proyecto aún a costa de los egos.

En el caso de Nuevo Encuentro, la posibilidad de reflejar un espacio social, trascendente a una persona en particular, cualquiera sea, no está asegurada, pero sí posibilitada. Los principales dirigentes: Carlos Raimundi, Carlos Heller, Gastón Harispe, Martín Sabbatella, Ariel Basteiro, Hugo Yasky, entre otros, están en condiciones de comprender perfectamente este dilema.

Este grupo y un conjunto mucho mayor ya se percató que las cuestiones políticas de hoy tienen en Cristina Fernández de Kirchner un parteaguas histórico. Y es así porque ella es un cuadro político que como tal puede salir de sí misma para inscribirse en el relato de la construcción emancipatoria del pueblo argentino.

sábado, 4 de mayo de 2013

Una respuesta deplorable

Por: Carlos Almenara
c.almenara@hotmail.com
Mendoza, 4 de mayo de 2013

El viernes 26 de abril la policía Metropolitana a cargo de Mauricio Macri reprimió ferozmente a pacientes, médicos, enfermeros, trabajadores del Hospital Borda y a militantes que se solidarizaron con ellos.
Las imágenes de la represión son espeluznantes. Policías disparando a mansalva, a quemarropa, periodistas y fotógrafos detenidos sin justificación posible, pacientes y médicos heridos. En fin, una represión absurda que sólo por suerte no terminó en un hecho luctuoso.
Estoy convencido que es responsabilidad directa de Macri, que no repara en “daños colaterales” para posicionar su mensaje de “vuelta al orden”.
Pero no es de eso de lo que quiero hablar.
Ante los cuestionamientos a la ferocidad de la represión, Macri y sus funcionarios responden que “la policía fue atacada a piedrazos”.
Una respuesta absurda, vieja y peligrosísima. Es la vuelta del discurso del terrorismo de estado y el retorno de la “teoría de los dos demonios”.
El Estado no puede responder sin respetar las garantías individuales. Un individuo puede violar la Ley, hay un Poder Judicial para sancionarlo. Pero la policía (el Estado) no puede actuar sin respetar los derechos y garantías.
Es una cuestión elemental, que todo el mundo sabe y conoce. Se vulnera en aras de fogonear un discurso represivo y demagógico cuyos responsables piensan que les dará rédito. Ojala se equivoquen. Sería un gran retroceso.
Los muchos abogados y jueces opositores que simulan escandalizarse invocando un supuesto “fin de la república” por las iniciativas de un ejecutivo nacional transformador, deberían decir algo de un concepto que acaba con el estado de derecho en su conjunto.
¿Dónde están los gremios de abogados que promociona TN explicándole a Macri que sus policías no pueden responder como barrabravas? ¿Ya que tanto les gusta la república, no le darían a Macri un curso acelerado? ¿Qué le pueden cobrar? Seguro que se entienden.

domingo, 7 de abril de 2013

Intereses contrapuestos


Por: Carlos Almenara
Coord. Delegación Mendoza AFSCA

Estos días hemos leído declaraciones del presidente de la Sociedad Rural del Valle de Uco por las que denuncia problemas de rentabilidad del campo mendocino. No tiene “mejor” idea que invitar a los miembros de la famosa “Mesa de Enlace” a que lo acompañen en el reclamo.
Frente a esa situación es conveniente recordar que esa Mesa de Enlace representa la economía rural de la pampa húmeda (supongamos que es verdad que la representa).
La economía de Mendoza no sólo no tiene los mismos intereses que la economía de la pampa húmeda sino que tiene un interés contradictorio con esa economía.
La historia argentina, en sus más de doscientos años, puede leerse como una disputa entre un modelo de país agroexportador primario y un modelo de país industrial. No es muy conocido que los telúricos ponchos que usaban nuestros gauchos, ponchos de cuero argentino, eran generalmente hechos en Manchester.
A lo largo de todo nuestro devenir histórico las economías regionales crecieron al calor de los proyectos industriales, no del agroexportador.
Hay razones macroeconómicas para que ello sea así. Los regímenes que debilitan el mercado interno, que abren las fronteras al librecambio bobo y que no protegen nuestra producción, no posibilitan la expansión de las economías regionales.
¿Hace falta decir que Mendoza es parte de las economías regionales?
La apertura indiscriminada y la libre flotación de la divisa, además de producir una concentración del ingreso (argumento con el que quizá no convenzamos a la Sociedad Rural del Valle de Uco), producen un régimen de pauperización de la producción regional.
Es decir, para que la producción del Valle de Uco, del Sur, del Este y del Norte de la provincia sea competitiva internacionalmente son necesarias las retenciones a la soja, al maíz y a la producción de la pampa húmeda en general.
Conocida como “maldición de los recursos naturales” o “enfermedad holandesa”, los países que tienen una alta productividad en una actividad, sea un recurso natural o no, tienden a hacer converger, de no mediar intervención estatal, el tipo de cambio en aquel que hace rentable esa actividad principal. En Argentina esa actividad es la producción de la pampa húmeda. Será entonces rentable producir granos pero no será rentable ninguna otra actividad.
El clivaje, el dilema principal de la economía argentina sigue siendo si encaramos un proyecto industrializador, con economías regionales fuertes y un agro sólido que aporte a una matriz productiva diversa o volvemos al proyecto agroexportador por el cual Argentina debe producir granos y vacas.
No hay identidad de intereses entre un productor de San Carlos y un productor de Pergamino. Si gana el de Pergamino, pierde el de San Carlos. Parece que la Sociedad Rural del Valle de Uco tiene una conducción fanática de Douglas Haig de Pergamino.




martes, 26 de marzo de 2013

Pensar la economía. Cambiar la cabeza.

por: Carlos Almenara Coordinador AFSCA Mendoza Hace unos días vi por televisión un fragmento de un noticiero local en que un egresado de la Universidad de Cuyo, licenciado en economía, analizaba la coyuntura. El lenguaje sigue siendo exactamente el mismo de la década de los noventa. El neoliberalismo más ramplón que nos llevó al desastre como país. Estos años han implicado transformaciones extraordinarias en el terreno de los hechos, sin embargo, muchos, incluso quienes reconocen esas transformaciones siguen pensando del mismo modo que durante el auge neoliberal. Es que ese discurso simplón, esa metáfora entradora de que “manejar un país es como administrar un hogar” está metido hasta el tuétano en nuestro sentido común. La comparación es muy simpática, pero es equivocada. Un país tiene resortes que no tiene una familia, el funcionamiento de una economía nacional tiene una lógica totalmente distinta de la de un hogar. Habrá ocasión de explicar mejor este punto. Quiero seguir con el economista entrevistado por el noticiero. Muy suelto de cuerpo esta persona afirmaba que en Argentina era menester “subir la tasa de interés”. Explicaba que para disminuir la inflación y la presión sobre el dolar “blue” había que hacer atractivas las tasas para que quienes tuvieran pesos los pusieran en plazos fijos. Me impresionó escucharlo de sopetón pero es en realidad el gran debate de la economía y la política en Argentina. Profundizar la transformación, las políticas económicas heterodoxas que recuperaron el control político de la economía o volver a los noventa, volver a la “autorregulación” de los mercados, volver a la sujeción de la política al mandato de las corporaciones económicas, volver a un Estado gendarme que sólo sirve para reprimir pero no para asistir ni equiparar. Estos casi 10 años desde 2003 hemos vivido el ciclo de crecimiento económico más extraordinario de los 200 años que llevamos como país. ¿Qué dicen las oposiciones? Que ha sido el “viento de cola”. Falso. Hubiera sido imposible ese crecimiento con las políticas neoliberales. Pero más importante aún, ese fenomenal aumento del producto no se hubiera traducido en esta magnitud en ninguno de los fundamentales indicadores que tanto han mejorado estos años: disminución del desempleo, disminución de la pobreza, disminución de la indigencia, aumento de la igualdad. Estos indicadores tienen rostro humano. Hablan de que niños que pasarían hambre en el modelo neoliberal hoy comen, hoy sus madres cobran una asignación universal que les da un piso de dignidad, hoy van a la escuela y al Centro de Salud. Cuando un señor, que además se arroga un supuesto saber, y, lo que es escandaloso, proviene de la Universidad pública, dice que hay que aumentar la tasa de interés, lo que le está diciendo es que hay que “enfriar” la economía, que no importa si aumenta el desempleo, en el largo plazo... En el largo plazo estaremos todos muertos decía J.M. Keynes. El modelo neoliberal inhumano, perverso y mentiroso sigue con sus defensores tan orondos. Todo lo que dicen es mentira. Una inmensa mentira que ya le ha costado demasiado sufrimiento a la humanidad.

Tú verás la patria nueva

Por: Carlos Almenara c.almenara@hotmail.com Tú verás la patria nueva. Verás cosas que nosotros no veremos ... ya nosotros seremos sabana, seremos viento. Hugo Chávez a una niña. Chávez será irreemplazable. No fue la clase de hombre que los biógrafos estudian como una excentricidad sin carnadura. Fue de los hombres cuya siembra cambia la topografía de la Patria. ¿Cómo será nuestra Patria sin él? Es que ya nunca estará sin él. Porque Chávez es un patriota de nuestra patria. Es algo que ya se dijo pero que se dice ahora de modo radicalmente nuevo. Como nunca. Negando la idea de la historia como ciclos de eternos retornos. Patria es Nuestra América. Nuestra América martiana. Del Sur del Río Bravo hasta la Patagonia. Las emancipaciones nacionales (de muchas naciones) es la derrota de los patriotas de la independencia que querían la patria grande, decía Abelardo Ramos. Esa idea fue renovada por Chávez, por Kirchner, por Lula, por Correa, por Daniel Ortega, por Evo y como una marea irresistible coronó en el proyecto de la UNASUR y, con la impronta anfictiónica de Chávez, en la CELAC. No se puede dejar de mencionar las groserías y barbaridades que se dijeron de él. Fue atacado como nadie. Enanos éticos e intelectuales utilizaron ampliamente pantallas, radios o diarios para insultarlo. No para discutir, no para contradecirlo; para insultarlo. El papel de los medios concentrados de comunicación masiva en la construcción de una chusma idiota que las corporaciones utilizan como remedo de los tanques de antaño sigue siendo el principal problema de nuestra democracia. Chávez como teórico. Chávez ha sido tipificado como muchas cosas, no ha sido destacada su dimensión como teórico político. ¡Y vaya si la tiene! Resume y crea una nueva doctrina política. Una doctrina que abreva en todas las doctrinas socialistas, en los textos de los patriotas seguramente encarnados de modo más visible pero no único en Simón Bolivar, y resulta al mismo tiempo inimaginable sin la experiencia histórica del fracaso estrepitoso del neoliberalismo y sin la resistencia intelectual latinoamericanista de, entre otros, nuestro querido Arturo Roig. Don Arturo y su tesonera labor de la construcción de una filosofía latinoamericana no pueden faltar en el recuento. Todas estas tradiciones fueron sintetizadas e interpretadas de modo original por el gran bolivariano. Aventurar el futuro es siempre riesgoso, desaconsejable. Lo que puede decirse es que estas ideas están más fuertes que nunca. Que están metidas hasta el tuétano en los pueblos. Que en cualquier casita de un barrio humilde está creciendo otro patriota que mira a los ojos y pregunta. Y pregunta aquello que el capitalismo y la concentración no puede responder. ¿Cuál es el piso mínimo de dignidad para compartir una sociedad? ¿Cómo construimos un pueblo? ¿Qué nos une? ¿Por qué sometidos al extranjero? ¿Por qué sometidos al capital? Que pregunta y se rebela ante lo injusto. Y que organiza su pueblo, su comunidad. Y que pone lo obvio sobre la mesa. Pone lo que de humanos tenemos todos para contradecir una sociedad injusta. Como todo el mundo sabe, la mirada sobre Chávez dice mucho sobre dónde se está parado en la política interna. Es lógico, siempre es así. El extraño sentido de la oportunidad de Binner no invalida la pertinencia de su aserto. Él hubiera votado por Capriles. A mi gusto hay dos palabras que silban en el viento, con cierto acento caribeño y que será difícil no escuchar. Soberanía e igualdad. No parece demasiado simple volver a ver en el corto plazo políticas de “relaciones carnales”, al menos sin que a buena parte del pueblo le produzca una vergüenza radical. Bueno, hay quien quiere pedirle prestado al Fondo Monetario... Tampoco parece factible la implementación de políticas de exclusión explícita (como las que ya vivimos) sin una rebelión popular. Creo que el legado de Chávez está allí como inspiración humanista y civilizatoria. ¿Cómo será futuro? No lo sé. Sólo sé que Nicolás Maduro, el nuevo presidente venezolano, tiene la misma pasta que el héroe de los de abajo que se nos fue.

martes, 12 de febrero de 2013

Viagra y “atentados”

12 de febrero de 2013 Luego de mostrarse favorables en un primer momento, la DAIA y la AMIA han asumido una actitud hostil al acuerdo con Irán para investigar el atentado de 1994. La primera contrató como asesor a Luis Moreno Ocampo, ex funcionario judicial en Argentina, abogado del foro, conductor televisivo y recientemente, fiscal de la Corte Penal Internacional. En tal carácter tuvo una participación destacada en múltiples conflictos en que alguna coalición internacional liderada por Estados Unidos quisiera invadir algún país subdesarrollado. Es inolvidable su participación en la invasión a Libia. ¿Cómo funciona el sistema de hostigamiento a la soberanía de países pobres? Aparecen informes de que se estaría cometiendo alguna atrocidad o de que se realizaría una actividad riesgosa para la población o para otras naciones. Tanto pueden ser las inexistentes “armas de destrucción masiva” que “justificaron” la invasión norteamericana a Irak como la violación a reglas democráticas revivificadas con repentino prurito por las potencias occidentales (prurito que no aplican por ejemplo con la nada democrática Arabia Saudita). Estos informes sirven para que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, si hay acuerdo, o la OTAN si no lo hay, inicie sus acciones. El Tribunal Penal Internacional es, paradójicamente, herramienta de legitimación de los ataques imperiales aunque Estados Unidos no acepte su competencia. El rol de Moreno Ocampo fue clave. El fiscal acusa de crímenes contra la humanidad al líder del país que Estados Unidos (o Francia y Reino Unido en caso de Libia) quiere invadir. El papel de Moreno fue impecable. No les falló ni una vez a los yanquis. Es memorable su intervención contra Khadafi. Alegó que Khadafi había importado contenedores de viagra que se usarían para violar las mujeres de sus enemigos. http://www.youtube.com/watch?v=R_6wxqEXjDY El perverso y ridículo informe del entonces fiscal de la Corte Penal Internacional nunca fue corroborado por ninguna otra fuente. Esa afirmación delirante sólo sirvió para que las fuerzas invasoras tuvieran “razones humanitarias” para matar libios. No haré una descripción de los horrores cometidos por los “libertadores”. Sí recuerdo que falta aún información sobre dónde están las reservas internacionales de Libia que algunos cuantificaban en U$S 200.000 millones, reservas que las potencias internacionales decidieron “congelar” y hasta hoy no aparecen. El gobierno italiano en un acto de sincericidio dijo que ellos las devolverían por “cuotas”. ¿No es este caso una joya de la seguridad jurídica internacional? La cancha inclinada del derecho internacional tiene en letrados como Moreno Ocampo más que abogados, agentes de las potencias dominantes. En un caso como la investigación del atentado a la AMIA es fácil ver a qué viene el ex fiscal. A operar los intereses de política internacional de Estados Unidos e Israel. Es lo mismo que está haciendo Guillermo Borger, presidente de AMIA, cuando asusta con nuevos atentados. Estamos esperando aún que sea citado a aclarar sus dichos por la justicia. La Cancillería argentina, consistente con los valores de memoria, verdad y justicia que rigen nuestra política interna, pero también con el respeto a los pueblos y con dignidad para no subsumir la política internacional bajo prepotencias ajenas, ha encontrado un camino posible. Posible no quiere decir exento de asechanzas.

domingo, 3 de febrero de 2013

Política para tomar el té (sin masas)

Se reconfiguran elencos de las oposiciones políticas. Hemos visto cómo Macri incorpora a sus “equipos” a campeones de la pantalla; luego de Del Sel, Lalo Ramos, Leandro Ginóbili y Rocío Marengo son sus nuevas promesas. Habrá incorporaciones. Es esperable que luego del sistemático intento erosivo y destituyente de los medios de comunicación resistentes a la legalidad y de los intereses que representan, el mismo proyecto político con otra táctica apele a estos métodos bien conocidos y que tuvieron preeminencia en los noventa. Se trata, luego de intentar inútilmente voltear al gobierno nacional, de construir una alternativa política. ¡Enhorabuena! Todavía resta que abandonen los intentos de golpe de mano. Nada indica avances ese tema. La presentación en sociedad de estos famosos pone en discusión uno de los elementos estructurantes del debate actual, polémica nombrada de múltiples modos, entre muchos: instituido – instituyente; administración – política; economía – economía política. En definitiva de qué se ocupa la política, si de “gestionar” sin alteración alguna de las relaciones de poder existentes en la sociedad o si por el contrario se encarga de discutir democráticamente qué sociedad queremos, qué pacto de convivencia deseamos, qué relaciones sociales consideramos justas y aceptables. Nada objetable hay en la participación política de estos mediáticos, al contrario. Lo que no deberíamos permitir es que nos hablen de fruslerías, de sus romances, de sus familias o sus vidas privadas y con ello evadan la explicitación de su proyecto político (que es lo que en verdad importa de un político). Insultos como los de Del Sel no ilustran sobre el proyecto que se sustenta, aunque sí muestra la calidad de su reflexión. En todo caso van en la misma clave de no hablar de lo importante. Claro que es de esperar que la comunicación concentrada encubra y dificulte este debate hablándonos de las confesiones de tal con su hija o del último espectáculo de cual, en lugar de abordar los temas de interés común. Seguramente construirán personajes queribles no políticos de un lado y políticos estereotipados como corruptos, confrontativos, alejados de “las necesidades de la gente”, negativos, por otro. Quizá la novedad de estos tiempos es que es probable que se encuentren algunos, varios, políticos que se paren sobre la política y se resistan a jugar ese juego. Que no vayan “a la cama con Moria”. Que no estén dispuestos a ponerse nariz de payaso para salir en televisión. Quizá algunos reivindiquen la política. Quizá lo hagan reconociendo sus lacras y postulando alternativas para superarlas. Quizá lo hagan proponiendo caminos colectivos y no individuales. Parte del crecimiento de los últimos años tiene que ver con ampliaciones de derechos de un pueblo que comienza a tener conciencia de sí y se asume protagonista informado. No parece un pueblo que se vaya a resignar dócilmente a que le arrebaten nuevamente lo sustancial de la política.

domingo, 6 de enero de 2013

La impostura del escándalo

6 de enero de 2013 Una de las más recientes maniobras de manipulación de los medios hegemónicos de comunicación resistentes al cumplimiento de la Ley fue el falso escándalo a cuento del brindis de fin de año del ministro Alak en la ex-ESMA. La presidenta ha explicado suficientemente el asunto, pero hay un punto que ella no ha mencionado y que resulta prototípico de los proveedores de pasajes a Miami a jueces amigos: la impostura del escándalo. Como hace tiempo abandonaron la información para producir shows, hacen shows de noticias y en ellos, en muchos casos con noticias falseadas, alteradas o por qué no, inventadas, el presentador “se escandaliza”. El procaz Nelson Castro es un maestro en estas lides. Imposta una indignación ejemplar, le habla a la presidenta... la reta, la maltrata, la insulta... indignadísimo. Indudablemente Lapegüe tuvo y tiene un lugar precursor en la construcción intimista de la comunidad Magnéttica, pero el resto de los miembros del equipo ha ido perfeccionando sus dotes actorales. El escándalo aparece como una impostura destinada generar sensaciones. ¿Por qué? ¿Qué buscan? Construir odio. Eso dice el libreto destituyente que escriben desde 2008. Eso explica que no haya razonamiento que valga porque lo que construyen no corresponde al mundo de la razón sino al de los sentimientos / sensaciones. Por eso no pueden construir una opción política. Sólo pueden horadar, odiar, dañar, no construir. Quieren el mal, pero no podrían proponer el bien porque para ello deberían volver al mundo de lo racional. No deja de ser impresionante la ubicuidad de estos tipos para criticar. Están en todos los lados. Si hay política de memoria, verdad y justicia, entonces dicen que debería haber reconciliación nacional y que el gobierno sólo mira el pasado y no la “reconciliación” de los argentinos, pero al mismo tiempo (sí, al mismo tiempo) que un periodista A pide reconciliación, ese periodista A afirma que los derechos humanos son una simulación de los Kirchner, y puede decir, si se le da tiempo, que la presidenta no es suficientemente radical en la defensa de los derechos humanos. Es la situación vista con Alak. Nunca les importó la ESMA. Lo que se hacía o se dejaba de hacer allí no los alcanzaba ni participaron de ningún acto o conmemoración. Ahora crean una supuesta violación a una memoria que inventan, porque la verdadera memoria está esquivando las zancadillas en los estrados judiciales para reconstruir la trama de cómo estos medios fueron cómplices del genocidio. Clama por justicia la apropiación de Papel Prensa por parte de Clarín y La Nación en una mesa de torturas. Hace pocos días Héctor Timerman contó una anécdota de su padre, Jacobo, por la que le decía a Claudio Escribano de La Nación – Claudio (los militares de la dictadura) no te piden tanto... Nada deja tan claro como esa historia la idea de democracia, libertad de prensa y convivencia civilizada que tienen los jerarcas de esos medios.